domingo, octubre 29, 2006


Sobre las jaras caen tonelas de piedras. En esta zona en el último año han caido bajo las palas de las excavadoras entre ocho y diez árboles. Se ha abierto un cráter enorme para albergar un depósito de agua del Canal de Isabel II. El crecimiento de población exige este servicio. Pertinaces, sin piedad, las máquinas han hecho su trabajo a lo largo de la primavera y el verano. Donde el pasado año crecian rabiosamente las ampapolas y los cardos alegrando la vista, donde blanqueaban las jaras y corría el arroyo ahora tatuado, es esto lo que hay.