Se acabó
Seguiré, no obstante, en el feldweg.
CAMINO DE CAMPO


Soy tan afortunada de poder detenerme ante el tronco desnudo de un árbol centenario y captar esta belleza, para acto seguido contemplar el hilo de la luz que se extiende de un poste a otro y cruza la pradera. Hoy hacía bastante frío y el paseo no era precisamente agradable. Sin embargo, ya veis que he podido disfrutarlo.
Tiene año y medio. Es hembra y atiende por Bombón. Es un dogo gigantesco que se desparrama ante la consulta del odontologo. Acude para que le apreten su aparato de ortodoncia. Hace unos cuarenta y cinco años, yo tambien esperaba en la elegante sala de espera de un dentista pionero de la técnica de enderezar la fila de dientes en un paladar estrecho. No salgo de mi asombro.

